La piña peruana, especialmente la de la selva central (Oxapampa, Satipo), es dulce, jugosa y de aroma intenso. En la Amazonía, se consume fresca, en jugos naturales, y como parte de platos típicos como el juane. En la costa, se prepara en refrescos caseros como la clásica “agua de piña”, y también en platos como el arroz chaufa tropical. Su sabor vibrante y su textura jugosa la convierten en una fruta que alegra cualquier mesa. Contiene bromelina, una enzima que facilita la digestión, y es rica en vitamina C. En la medicina tradicional, se usa para tratar inflamaciones y mejorar la circulación.